En cuanto al conocimiento de la mujer en la Antigua Grecia, debemos recurrir a los restos arqueológicos y a las fuentes documentales escritas desde la perspectiva masculina. Se reconoce que el papel principal asignado a las mujeres era el ámbito doméstico, limitándose estrictamente a las labores del hogar. Aunque eran personas libres, no se les consideraba ciudadanas plenas y se les vetaba la participación en asuntos políticos, militares y civiles. Además, estaban subyugadas a la autoridad de los hombres, ya sea el marido, padre o hermano, en una estructura patriarcal. No obstante, las mujeres desempeñaron un papel importante en la religión helena como sacerdotisas. También se les atribuye participación en los mitos, como el caso de Pandora, considerada la primera mujer. ¿Cuál era la percepción que los griegos tenían sobre las mujeres en este mito?
Pandora considerada el mal de los hombres
El nacimiento de Pandora está estrechamente vinculado al mito de la creación del mundo y la humanidad, donde Zeus castigó a la humanidad por los actos de Prometeo, quien había robado el fuego para entregárselo a los humanos. Pandora representa el último de esos castigos y simboliza la división sexual mediante un ser construido. Hefesto es el encargado de crear a una mujer encantadora, capaz de enamorar tanto a hombres como a dioses. El nombre Pandora significa «regalo de todos» porque todos los dioses le otorgaron dones como regalo. Por ejemplo, Atenea le otorgó habilidad, Afrodita encanto, y Hermes le brindó un carácter cínico y voluble. Además, recibió vestidos plateados, velos de encaje, guirnaldas de flores y una corona de oro.
Tanto hombres como dioses se enamoraron de Pandora, incluido Epimeteo, quien engendraría con ella a la primera mujer llamada Pira. A partir de ella se originó la raza de las mujeres, quienes fueron consideradas por naturaleza el mal del hombre y malvadas. Pandora no trae el mal a la humanidad debido a su maldad intrínseca, sino por su curiosidad. Su curiosidad la llevó a abrir el cofre que los dioses le prohibieron destapar. El mito consideraba tanto a Pandora como a todas las mujeres como seres poseídos por la curiosidad. Al abrir el cofre, Pandora liberó todos los males que azotarían a la humanidad, como desgracias, plagas, hambre, etc. Cuando intentó cerrar el cofre, ya era demasiado tarde, todos los males habían escapado, excepto la esperanza, que quedó atrapada en su interior. Como resultado de esta acción, Pandora puso fin a la felicidad que los hombres tenían anteriormente.
Existen diversas fuentes literarias sobre este mito, siendo las obras de Hesíodo las más influyentes. En su obra Teogonía, Pandora aparece como la madre de las mujeres, creadora de una estirpe maldita de mujeres en medio de hombres inmortales. Para ilustrarlo, los hombres son engendrados por los dioses, mientras que las mujeres son creadas a partir de una mujer construida y no engendrada. En su otra obra, Trabajos y días, encontramos los mitos de la creación de la humanidad, entre ellos el mito de Pandora. Aquí, Pandora surge como la venganza de Zeus contra Prometeo y la humanidad. Este castigo llega a través de Epimeteo, quien sucumbe al engaño y la debilidad, provocando la pérdida del paraíso para la humanidad. ¿No os recuerda a algo?
Pandora es considerada un ser construido, un ser artificial sin inteligencia ni bondad, aunque en apariencia divina. Se cree que bajo esa apariencia divina se esconde la maldad en su corazón. Por eso, plantea un dilema a los hombres: si casarse y aceptar su mal, a cambio de engendrar hijos y continuar su descendencia. Por tanto, la mujer representa tanto el bien como el mal y se les asocia con la muerte, ya que se cree que traen consigo enfermedades y desgracias que acaban con la vida.
Bibliografía
[1] FUENTES SANTIBÁÑEZ, P. (2012), «Algunas consideraciones en torno a la condición de la mujer en la Grecia Antigua», Intus-Legere Historia, 6, pp. 7-18.
[2] ESCARTÍN GUAL, M. (2008), «Pandora y Eva: la misoginia judeo-cristiana y griega en la literatura medieval catalana y española», RLLCGV, 13, pp. 55-71.
[3] HALMITON, E. (2021), Mitología. Todos los mitos griegos, romanos y nórdicos, Ariel, Barcelona.